Cualquier corporación que busque competir en un mercado global y cambiante, tiene que desarrollar una estrategia y cultura de productividad empresarial. Muchas veces no están dadas las condiciones para que exista esta productividad dentro de una empresa. Es por eso, que en este post te traemos 10 tips para alcanzarla.
En pocas palabras, se refiere a todas aquellas acciones en las cuales la empresa invierte recursos y al mismo tiempo puede sacar un provecho máximo de ellos.
Es un indicador fundamental del estado de una compañía y la calidad de su gestión administrativa.
No hay un solo punto débil en los procesos y la forma de trabajo, sino que todo llega a un punto máximo posible de eficiencia y calidad.
¿Cómo puede aumentarse esta eficiencia en una organización? Te damos una serie de tips para lograrlo
Llevar a cabo una tarea sin plantearse de antemano las razones o sin tener en claro cuál será el destino final, no solo es monótono sino que también reduce la productividad. El trabajo por objetivos implica a los colaboradores directamente con la finalidad del proyecto y hace que todos se sientan parte del crecimiento y el desarrollo de la empresa.
Por ende, te recomendamos trabajar para alcanzar determinados promedios, llegar a un número determinado de clientes en un tiempo establecido o desarrollar nuevos productos, por ejemplo. Generar objetivos claros y alcanzables.
La tecnología es tu mejor aliada a la hora de lograr una productividad sólida en tu empresa. Ha venido para aliviar la vida profesional y personal de las personas a través de la modernización. Por eso, es muy útil usar herramientas como maquinarias nuevas, firmas electrónicas, copias de seguridad, la nube, entre otras.
Modernizarse no solo implica tener más tecnología, también es una forma de pensar y proyectar la compañía hacia adelante. Es la capacidad de adaptarse a los cambios y mantenerse vigente.
La competencia siempre está innovando. Es por esto que tu empresa no debe quedarse atrás. La innovación ayuda en el análisis del modelo de negocios para encontrar nuevas alternativas que sirvan para mejorar su gestión y hacer un uso de los recursos más óptimo.
Por ejemplo, se puede innovar en la gestión organizacional, en las herramientas o en el aparato productivo. De esta manera tu compañía será más competitiva y hasta puede idear nuevos productos y servicios.
Un trabajador formado es un empleado que está motivado. La formación constante de tus colaboradores mejora su compromiso con la empresa. Dándoles acceso a una educación de calidad y actualizaciones constantes en sus carreras, les permitirá desarrollar mejor las tareas de sus puestos de trabajo y fidelizar aún más con la corporación.
La motivación es necesaria para mantener la actitud positiva de todos los empleados y lograr que comprendan sus tareas para el buen funcionamiento de toda la organización.
Es fundamental crear políticas de bienestar y satisfacción de los trabajadores, creando un ambiente laboral cómodo y alineado con la empresa. Se trata de realizar actividades y acciones que desarrollen el capital humano. Por ejemplo: aniversarios, cumpleaños, reconocimientos y capacitaciones.
Un colaborador preocupado por potenciales accidentes laborales, es un empleado que pone una solo usa una parte de su atención y concentración en el trabajo. La seguridad es un elemento clave en cualquier empresa y una gran apuesta para mejorar la productividad.
Es muy importante que las empresas favorezcan la implementación de horarios de trabajo que ayuden a tener un equilibrio entre la vida laboral y personal. Cuando un empleado tiene este equilibrio para trabajar y con su tiempo de ocio, su rendimiento mejora y también se reducen sus problemas físicos y mentales.
Algo que comparten las empresas y personas exitosas es la correcta gestión del tiempo. Para que una organización pueda ejecutar todas las actividades que se ha propuesto, debe organizar y priorizar sus tareas en función del tiempo.
El tiempo es uno de los recursos más importantes a tener en cuenta para aumentar la productividad.
No plantar la comunicación como un monólogo para que el resto siga, sino más bien como un diálogo. Escuchar a los colaboradores y obtener feedback. Esto ayuda a ver una cuestión desde distintos puntos de vista, para crear diversas soluciones.
Cruzando las fronteras existen nuevos mercados y un potencial de negocios que tu empresa aún no conoce. Abrirse a la posibilidad de incursionar en nuevos mercados puede hacerte descubrir otras vías para aumentar la rentabilidad y productividad de la compañía.
Como habrás podido observar, la productividad empresarial depende de varios factores, los cuales al cumplirlos mejorarán la rentabilidad de los trabajadores y de toda la organización.
Como mencionamos anteriormente, la capacitación contínua es muy importante. El inglés es el idioma universal por excelencia y abre muchísimas puertas profesionales. Desde Wall Street English ofrecemos cursos 100% online, con profesores nativos y con una metodología que ha sido testeada en miles de personas de todo el mundo. Es hora de llevar tu formación al próximo nivel. Aprende inglés hoy mismo.